La llegada del tiempo frío y lluvioso hace que muchos conductores se planteen cambiar a unos neumáticos de invierno o a los llamados para todas las estaciones (all-season). Os damos toda la información para que elijáis los que mejor se adapten a vuestras necesidades.
El momento de cambiar de neumáticos en nuestro coche abre un dilema: ¿instalo un neumático específico de invierno o mejor uno para todo tiempo o para todas las estaciones? Desafortunadamente, la respuesta no es sencilla y depende de muchos factores: el tiempo que hace en la zona por la que te mueves habitualmente, el uso que hagas del vehículo o, incluso, el kilometraje anual, unido al presupuesto del que dispongas.
Qué tener en cuenta para elegir neumáticos de invierno
Hay una razón poderosa para elegir neumáticos de invierno cuando llega el frío: que sean obligatorios. Sucede en muchos países del Europa Central y, por supuesto, en los nórdicos; pero no es el caso de España. Aquí solo se exigen este tipo de neumáticos o cadenas para la nieve en determinadas condiciones de movilidad y, normalmente, en zonas de montaña.
Si vivimos en una zona de alta montaña con nevadas frecuentes, sin duda será una buena elección para que nuestra movilidad esté asegurada. Eso sí, hemos de tener en cuenta que estos neumáticos, por las características de los compuestos que se utilizan, pierden gran parte de sus características cuando la temperatura asciende. Lo más recomendable, pues, es tener dos juegos de neumáticos: uno de verano y otro de invierno, y, además, un lugar donde almacenar esas cuatro cubiertas que no se utilizan, lo que a veces puede resultar un poco engorroso.
Por qué elegir neumáticos para todas las estaciones
En España tenemos un clima moderado la mayor parte del año y en la mayor parte del territorio. La gran mayoría de los automovilistas circulamos con neumáticos de verano en nuestros coches. Pero es cierto que cada vez más se eligen cubiertas all-season que ofrecen un buen rendimiento todo el año. Están diseñadas para ofrecer un buen agarre tanto en carreteras secas y calientes como húmedas y frías. No obstante, atención, hay que saber que su rendimiento sobre nieve o hielo no es tan bueno como los específicos de invierno.
Con todo, sus ventajas son que también están homologados para circular sobre nieve en lugar de las cadenas, ofrecen mejor agarre que los neumáticos de verano cuando bajan las temperaturas y ofrecen una buena sujeción también en verano.
Frente a los neumáticos de invierno, su gran ventaja es que no tenemos que cambiarlos cuando acaba la temporada invernal. Además, su precio suele ser poco mayor que el de los de verano.
Un buen ejemplo de este tipo de neumático es el modelo Kumho Solus 4S HA32, que gracias a su compuesto multifuncional S-SBR y el diseño de su patrón direccional de la banda de rodadura ofrece un excelente rendimiento en carreteras mojadas y una tracción mejorada cuando encontramos la vía nevada. Y, además, está homologado con el símbolo M+S y el alpino de los tres picos (3PMSF) para poder circular cuando se exigen cadenas.
Neumáticos de invierno o all-season. Conclusiones
El diseño de los neumáticos de invierno, con sus ranuras anchas y profundas y compuestos específicos, se adapta mejor a las bajas temperaturas y ofrece un excelente agarre en carretera en climas muy fríos, especialmente en aquellos lugares donde la temperatura rara vez sube de los 7 grados en invierno. Con más grados, los neumáticos para todas las estaciones tienen un mejor rendimiento general.
Otra de las razones que hay que tener en cuenta es que en verano es recomendable no usar neumáticos de invierno. Habrá que guardarlos en un sitio convenientemente habilitado.